Sunday, April 16, 2006

Al terminar esta semana mayor, no importa el credo o religión de la que seamos seguidores, siempre existirá ese día primordialmente en el que se guarda por un instante un corto receso a las actividades cotidianas. El viernes santo, es de por si, el día más importante de la semana santa. Se recuerda con mucho fervor, el sacrificio de un hombre que partió en dos la historia de la humanidad.
¿Cómo alguien como aquel humilde nazareno pudo cambiar y generar todo este gran movimiento espiritual?, simple, sabía perfectamente la misión que todos tenemos en este mundo, ahora bien, hacerle entender eso a todo aquel que lo siguió en su momento no fue una tarea fácil, y ahora, en nuestros días, el bombardeo infinito de información acaba completamente con ese mensaje. Desde los inicios de la humanidad, la característica primordial del hombre ha sido y será la de buscar respuestas a todo; ¿de donde venimos?, ¿qué sucede cuando morimos?, ¿existe vida después de la muerte?, hasta la tan mencionada frase, típica de la nueva era, ¿estamos sólos en el universo?, ironicamente me pregunto ¿por qué?.
De una manera casual, por estos días se está difundiendo la existencia de un escrito antiguo que revela como Judas, que por miles de años fue el "malo del paseo", ahora es el personaje más importante que le pondría punto final a la misión del Rey de los judios, con un acto de obediencia impartido por su propio maestro. Como es de esperarse, la iglesia se ha manifestado en total desacuerdo con este nuevo evangelio, cuando sólo es un documento de tantos que existieron y se perdieron en el tiempo, ya sea para no revelar sus secretos, o simplemente fueron descartados por heréticos. La razón de encontrar nuevos caminos o fundamentos que conduzcan a la verdad serán motivo de acusaciones por parte del clero, porque desdibujaría la imagen religiosa de su principal lider y salvador.
Pero el hombre siempre se ha valido de tener a su aliado espiritual, a ese algo o alguién que no vemos, pero que sabemos que existe, y que mejor manera de humanizarlo que encontrar en una sóla persona, la imagen más pura de esa divinidad. No quiero profundizar en las creencias religiosas, pero quiero dejar presente que si hubo alguien que dejo un gran mensaje, y que según las escrituras, entregó su vida por ello, es digno del mayor respeto, algo que lamentablemente mucha gente está olvidando.
La institucionalización de fechas para cada tema en particular, permite que recordemos para ese día específico, que existe una madre, que existe la amistad, que alguna vez nació un redentor, o que debemos hacer honra del trabajo, así ese día no haya que laborar. Sólo se trata de eso, una fecha ordinaria establecida, cuando en todo momento debemos tomarnos un minuto de nuestro tiempo para darnos cuenta de esas cosas importantes y que hacen parte de nuestra vida. Despertar y dar gracias por un nuevo día, sonreir y ser cordiales con la gente que nos rodea, llamar a esas personas especiales, compartir momentos con ellos, disfrutar de cada instante de nuestras acciones, porque en eso está el placer de existir, y así lo vió un hombre que todos recuerdan en esta fecha, y la razón principal de su labor en la tierra fue esa, transmitir un mensaje de paz y que no existe nada más grande en el mundo que el amor. Simplemente es eso. Amor.

Este es un espacio para las ideas del pensamiento, que constantemente emergen por alguna razón, irrumpiendo con la cotidianidad de las acciones. Las palabras tienen un poder inconmensurable con el que podemos infundir una voz de aliento a alguien que lo necesita, o por el contrario, destruir a quién deseemos algún tipo de mal. Pero esa no es la intención.
He querido recoger cada palabra que sale de aquella voz interior, la que me impulsa a escribir estas líneas y poderla compartir con todo aquel que quiera encontrar en este universo virtual, algo interesante que leer.
A manera de bitácora, trataré de mantener una constancia, y dejar un poco de mis ideas, opiniones y ensayos en este blog, que serán a partir de hoy un encuentro con esas pasiones y sentimientos, desde la apreciación de un buen libro, las artes como la música y el buen cine, hasta las experiencias y sucesos que en algún momento dejan su propio mensaje. Bienvenidos.